Puede que yo no sea especialmente objetivo y ecuánime cuando hablo de Estambul y de Turquía. Pero es que fue el primer viaje que hice con mis hijos para escribir reportajes. Así que le tengo un cariño especial.
Tengo grabado en la memoria cuando descendimos del avión y mi hijo me preguntó si estábamos muy lejos de casa. Además, nos alojamos en un Hyatt, cadena que por aquel entonces me parecía el culmen del exotismo. Todavía nos reímos en mi casa cuando nos acordamos de la cara que pusieron los abuelos de los niños cuando les dijimos que íbamos de viaje a Turquía. Les pareció que estábamos locos por ir a un país tan “exótico” con unos niños tan pequeños. ¡¡A un país musulmán!! ¿No sabíamos quién era Bin Laden?
Menos mal que se lo dijimos con poco tiempo de antelación, porque aunque fueron pocos días, nos calentaron bastante la cabeza. Por cierto, a los dos años, mis suegros estuvieron en Turquía y les encantó. Supongo que el bolso que les regaló mi mujer de piel y el abrigo que se compraron ellos de cuero, tuvo que ayudar a su percepción positiva.
Estambul es una ciudad perfectamente visitable con niños. Evidentemente, como toda gran ciudad tiene sus lugares no recomendables, y tiene que visitarse con conocimiento y sin cometer locuras. Pero eso es igual en donde vivimos nosotros. Hay barrios que mejor evitar.
En Estambul hay verdaderas maravillas para visitar. El Palacio Topkapi es una de ellas. Como vamos con niños, hay algunas cuestiones a tener en cuenta. En primer lugar, que al ser un monumento muy visitado, nos encontraremos con colas. Si hace calor, llevar agua será una buena idea. Y en segundo lugar, ya que hablamos del agua, sería conveniente que los niños hayan hecho sus necesidades en un bar o restaurante medio moderno. Porque los servicios públicos allí son “a la turca”. Es decir, un agujero en el suelo. No están sucios, pero no hay dónde sentarse.
Lo que sin ninguna duda hemos de visitar con los niños son la Iglesia de Santa Sofía y la Mezquita Azul. Ambas son mezquitas. Lo mismo que la Mezquita de Córdoba es una iglesia católica. Las mujeres deben llevar un pañuelo y no ir con demasiado cuerpo a la vista. Yo tengo hijos varones, pero me fijé que lo hacen por altura, no por edad. Si tu hija es alta, le dicen que se cubra, y otra niña más mayor pero bajita, lo mismo no le dicen nada. También hay que descalzarse para entrar.
A nuestros hijos también les gustó mucho el paseo que nos dimos en barquito. Se ve una perspectiva diferente de la ciudad, y es una cosa distinta a lo habitual.
Alojarse y comer
Estambul es una ciudad con una grandísima oferta hotelera. Podemos encontrar el tipo de hotel, con el tipo de configuración de habitación que necesitemos. A partir de un cierto nivel todo el mundo habla inglés, y cada vez más hay empleados de hotel que hablan español.
No tiene ninguna dificultad comer bien con niños en Estambul. Eso de que la comida turca es difícil y especiada, es más bien leyenda urbana. La hay con muchas especias y mucho picante. Pero yo he comidos callos en pueblos cuyo nivel de picante no lo supera nada.
Si queremos sentirnos muy cerca de casa en lo gastronómico, los restaurantes de pescado nos trasladarán mentalmente a los chiringuitos de pescaíto frito de La Carihuela. Incluso los pimientos asados y el alioli de yogur nos acercarán aún más.
A mí me encantan los shawarmas. Mi mujer los odia. Pero a los niños en general, eso de que te corten la carne del bocata de un pincho gigante, les suele gustar. Deberemos de estar atentos y no pedir picante. Porque cuando un shawarma pica en Estambul, pica de verdad.
Los precios para comer en familia en Estambul son asequibles. Bien es verdad que los restaurantes de superlujo son caros. Pero incluso estos, son algo más baratos que en España. Además, las raciones suelen ser generosas, por lo que compartir platos es una buena opción. Las guarniciones suelen ser ensaladas de verduras muy buenas. Los platos típicos turcos están muy buenos y los postres son dulces que los niños suelen aceptar bastante bien.
Bazares
No nos podemos perder el Gran Bazar. Pero es posible que al principio nos podamos sentir intimidados. Porque es inmenso y hay muchísima gente. Puede agobiar porque, al menos yo, no sabía orientarme, solamente paseé y deambulé. Pero no pasa nada, no se nos van a perder los niños ni nada parecido. Pero si alguno es especialmente aprehensivo, pero no quiere perderse la experiencia de ver un bazar, puede cambiar el Gran Bazar, por el Bazar de las Especias. Es muchísimo más pequeño y manejable.
Parque de las Miniaturas
Nunca recomendamos visitar parques o similares en nuestros viajes, porque hacerse un montón de kilómetros para meterse en algo idéntico a lo que puedes ver en tu ciudad, pues no. Pero hay un tipo de parque que sí es recomendable. El de las miniaturas de las principales atracciones de Turquía. A una escala aceptable, podremos ver las cosas más significativas de Turquía, dando un paseo y sin necesidad de hacer miles de kilómetros. En viajes posteriores hemos visto en directo algunas de esas maravillas, y la verdad es que están muy bien recreadas en el parque. Si comemos en el parque, recordar que las hamburguesas son de cordero, por lo que a lo mejor nuestros hijos extrañan el sabor.
Combatir el calor
Si vamos en verano a Estambul, deberemos de tener en cuenta el calor. Los niños son más sensibles que los adultos a este tema. Una buena idea es alojarnos en un hotel con piscina. Para hacer las excursiones temprano, descansar y/o tomar un baño, y salir con “la fresquita” luego. O estar todo el día fuera, y refrescarnos al llegar al hotel. No es difícil encontrar hoteles con piscina, y no suponen un desembolso extra. Ya que hablamos de hoteles, nuestra recomendación es alojarnos en hoteles de cinco estrellas. Es posible encontrar de cuatro estrellas con buen nivel, pero si no tenemos referencias directas, correremos el riesgo de pagar sólo un poco menos de dinero por bastante menos calidad.
Conducción
El tráfico en Estambul es caótico. Es una ciudad muy, muy grande, y todo el mundo tiene prisa. Como en París, Roma o Madrid. En eso se puede decir que Estambul es una ciudad 100% europea. Hay algunos conductores que creen que las señales de tráfico son decorativas, pero los semáforos los respetan algo más. De todas maneras, con el semáforo en ámbar, mejor esperar.
Algunas precauciones
Estambul no es una ciudad peligrosa para ir con niños. De todas maneras, me fijé algunas familias americanas lo que suelen hacer es vestir a los niños con camisetas del hotel donde se alojan. Yo vi varias del Hilton. No es mala idea si nuestros hijos tienen camisetas con su nombre. Aunque lo que yo hago siempre, en todos los países, es meterles en el pantalón una fotocopia de su pasaporte y una tarjeta del hotel. Pero que esto es algo que hago habitualmente, vaya a Estambul, o a Londres.
Otra visión
Una de las cosas interesantes y pintorescas de coger un guía en Estambul para conocer la ciudad, es escuchar la otra versión de la historia. Los cruzados no son esos guerreros románticos y caballerosos, los turcos no eran los piratas del mediterráneo más salvajes, Soliman era un perfecto estadista, y bastantes cosas similares. Para los niños eso de escuchar otras versiones siempre está bien. Aunque la verdad, para mí que crecí leyendo El Capitán Trueno y similares, me gusta más la versión en la que Ricardo Corazón de León es un gran caballero amigo del Capitán. El único que podía igualársele en la lucha, aunque siempre con la sospecha de que nuestro amigo Trueno no se empleaba al 100% por respeto.
Hola!
Nos vamos en agosto con nuestro hijo de 8 años.
Es muy caro un guía para un día, solo para nosotros? Sabes de alguien?
Muchas gracias!
Que pasada de web. Tengo dos niñas una de un año y otra de 8. Y vuestros consejos, para poder disfrutar de un viaje diferente con niños son realmente interesantes y pueden ayudar mucho!! Gracias por vuestra pagina!!
Estupendos consejos y muy útiles pero, por favor, corregid eso de comida árabe, país árabe… Turquía no es un país árabe, es musulmán pero NO árabe.
¡Hola, Regikina!
Gracias por tu observación, lo corregiremos en cuanto podamos 🙂
¡Un saludo y gracias por comentar!