Situado en el sur de la isla de Tenerife, Arona es un municipio que se caracteriza principalmente por sus bellas playas de origen volcánico. Este destino vibrante y en continuo movimiento ofrece el mejor y más variado entretenimiento posible para familias. ¿A qué esperáis para conocerlo?
Aunque su origen se encuentra en las medianías, donde hoy día todavía conserva su sede el Ayuntamiento, el municipio conoció un gran desarrollo a partir de los años 60 del siglo XX gracias al turismo que hizo que la costa creciera en importancia especialmente alrededor del enclave pesquero de Los Cristianos.
Hoy día, Arona es un centro turístico de gran nivel donde conoceremos playas de ensueño con hoteles de cuatro y cinco estrellas de máxima categoría. Su gran oferta de ocio tanto diurno como nocturno es uno de los motores que mueven la economía de la isla de Tenerife convirtiendo así a este municipio en uno de los más importantes.
Las primaverales temperaturas de las que disfruta esta región durante todo el año posibilitan excursiones por la costa sur tinerfeña y al cercano Parque Nacional del Teide.
Arona se divide en cuatro zonas bien diferenciadas: Playa de las Américas, Playa de los Cristianos, Playa de Las Galletas-Costa del Silencio y Arona Rural. Existe un tren turístico que recorre las calles de Los Cristianos y de Playa de las Américas y ofrece tanto a niños como a mayores la posibilidad de conocer Arona con la comodidad de esta ruta guiada.
Playa de las Américas
Playas de las Américas se caracteriza por sus excelentes playas que permiten, además de jugar en la orilla y bañarse, practicar deportes acuáticos para diversión de toda la familia. Su paseo marítimo es idóneo para hacer ciclismo, footing y patinaje o, simplemente caminar tranquilamente mientras disfrutamos del paisaje. Destaca también por las esculturas que se encuentran a lo largo del paseo y que son obras de artistas como Juan López Salvador o Drago Díaz.
Los Cristianos
Es un pueblo que aún conserva su espíritu marinero. Allí se concentra la mayor parte de la actividad comercial y cultural de Arona además de tener grandes conexiones marírimas desde su puerto. Desde luego es una zona que tenemos que visitar si queremos dar un paseo para hacer unas compras y también para conocer parte de la cultura y la historia de Arona.
Las Galletas-Costa del Silencio
El mayor atractivo de esta zona es sin duda la belleza de su costa y la tranquilidad que se respira en ella. Además, sus fondos marinos son ricos y variados, ideales para que los aficionados al buceo se sumerjan en sus aguas a descubrir sus secretos. Allí, lugares como la Punta de la Rasca o el Malpaís de Rasca, considerado Espacio Natural Protegido, son de obligada visita.
Su costa accidentada está bordeada por un sendero perfecto para un paseo tranquilo junto al mar. Este camino comienza en la urbanización Bella Vista y continúa hasta los apartamentos West Haven Bay. Justo al lado del complejo de Ten-Bel se encuentra, además, una piscina natural de agua de mar perfecta para refrescarse y descansar después del paseo.
Por otro lado, el paseo marítimo es la mejor forma de recorrer este pueblo pesquero. A través de él es posible acceder a la playa de arena negra volcánica de la localidad y al muelle pesquero. Fruto de la tradición marinera de Las Galletas, en el paseo se encuentran diferentes restaurantes especializados en pescado fresco en los que merece la pena pararse para coger fuerzas y seguir conociendo Arona.
Arona rural
Aquí es donde se encuentra el casco histórico de la ciudad así que es el lugar al que debemos ir para dar un paseo tranquilo en familia y descubrir un árbol monumento, un ejemplar de almácigo centenario que tiene una altura de nueve metros y está incluido en el Libro de Árboles Monumentales de Tenerife. Este árbol es uno de los elementos del escudo heráldico del municipio, por lo que forma parte de su patrimonio cultural.
El corazón de Arona está declarado Bien de Interés Cultural y se encuentra representado en la iglesia de San Antonio Abad, construida en el siglo XVIII sobre una antigua ermita. Dentro del edificio se encuentra la figura del Cristo de la Salud, sin duda su pieza más valiosa. Los alrededores de la iglesia con sus casas señoriales y las calles cubiertas de adoquines invitan a un paseo relajado mientras nos comemos un helado y charlamos.
Además, este lugar es un buen punto de partida para un paseo a pie en el que acercarse a El Calvario y a la zona alta de Arona donde se encuentra la Cruz de San Antonio situada en un mirador privilegiado del municipio y que además conserva numerosas tradiciones y leyendas relacionadas con este santo.
Naturaleza pura
Además del primaveral litoral canario, este municipio cuenta con espacios naturales protegidos como el Monumento Natural de la Montaña de Guaza, la Reserva Natural Especial del Malpaís de La Rasca y gran parte del Monumento Natural del Roque de Jama todos ellos incluidos en la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos. También hay paisajes de gran valor natural como la Montaña Amarilla o el Valle de San Lorenzo.
Tanto el área del Monumento Natural del Roque de Jama como la Reserva Natural Especial del Malpaís de La Rasca se incluyen en la Red Natura 2000 como Zonas Especiales de Conservación, a las que se suman las ZEC marinas de la Franja Teno-Rasca y de los Sebadales del Sur de Tenerife. Asimismo, la Montaña de Guaza y el Malpaís de la Rasca son también Zonas de Especial Protección para las Aves.
Las impresionantes vistas del Teide, la mayor altura de España con sus 3.718 metros, o los distintos elementos volcánicos (coladas, pitones, domos…) son los atractivos que ofrecen lugares como el Roque de Jama, el mirador El Centinela o el Malpaís de la Rasca, sitios que no tenemos que dejar de visitar para conocer el lado más genuino de Arona.
Desde Arona se puede recorrer la parte sur de la isla de Tenerife para llegar al Parque Nacional del Teide, en cuyas cañadas se encuentra su magnífico Parador de Turismo. En Vilaflor podremos disfrutar del increíble Paisaje Lunar, mientras que si seguimos el perfil de la costa llegaremos a playas como San Juan, la Caleta o Los Gigantes, a los pies de los acantilados del mismo nombre.
La mejor cocina tradicional
Si queremos disfrutar de una comida tranquila es mejor que acudamos a pequeñas playas y calas, mientras que encontraremos más animación junto a los complejos turísticos. Restaurantes, bares de copas y terrazas con vistas al océano son algunas de las opciones para disfrutar de la noche canaria en caso de que nos apetezca salir a tomar algo después de cenar.
Aunque en Arona se puede degustar cualquier tipo de cocina internacional, es necesario probar alguna de las recetas más típicas de la zona. Potajes de verduras, cazuelas de pescado y carnes a la brasa forman parte del recetario canario tradicional. El mojo picón con aceite, vinagre y pimentón y las papas arrugadas, de excelente sabor, son otros de los productos propios de la isla que tenemos que probar.
Entre los vinos, podemos elegir elegir entre una amplia gama de embotellados con Denominación de Origen propios de la provincia de Santa Cruz de Tenerife como Abona, El Hierro, La Palma, Tacoronte-Acentejo, Valle de Güimar, Valle de la Orotava e Ycoden-Daute-Isora
Turismo accesible
Arona se caracteriza por ser uno de los principales destinos accesibles internacionales y cuenta con una extraordinaria oferta de hoteles adaptados y accesibles a la vez que amplias zonas y paseos preparadas para personas con movilidad reducida, contando entre otros atractivos con el paseo adaptado más largo de Europa o una plataforma de baño asistido en el mar, con personal cualificado, un servicio público y totalmente gratuito. Personas con diversidad funcional auditiva o visual también cuentan con servicios y actividades culturales destacadas a lo largo del año.
Turismo sostenible
Arona ha recibido la certificación Biosphere, otorgada por el Instituto de Turismo Responsable (ITR). Gracias a sus esfuerzos por preservar la naturaleza y crear un turismo responsable con el medio ambiente, el municipio se posiciona de esta forma como un destino sostenible entre las ciudades españolas.
Arona ha propuesto un programa basado en la reducción de emisiones de CO2 en relación al sector del turismo. Su participación activa en el desarrollo del turismo sostenible y la concienciación de los profesionales de turismo de la localidad son los factores que han llevado al ITR a certificar esta ciudad como Destino Sostenible, un hecho destacable tanto dentro del territorio canario como estatal.
Esta certificación, además de aportar un valor añadido a los lugares que la reciben, es una forma de asegurar que los destinos turísticos españoles se comprometen con el turismo sostenible y accesible, un tipo de turismo en crecimiento y con un gran desarrollo por delante.