La isla de Gran Canaria tiene motivos de sobra para ser escogida como destino de vacaciones por las familias con hijos: el sol, la playa y la naturaleza son los más conocidos pero también hay un importante patrimonio cultural, una gastronomía deliciosa y la posibilidad de practicar todo tipo de deportes, tanto de interior como acuáticos. A esto hay que unir un suave clima único en toda Europa que acompaña al relax y a la diversión que tiene Gran Canaria para ofrecernos.
El continente en miniatura
Éste es el apelativo que identifica a Gran Canaria debido a sus peculiaridades geográficas y a la diversidad de su relieve y sus paisajes que provocan la existencia de microclimas. Un 42% del territorio de la isla cuenta con la protección de la UNESCO desde el año 2005 en el que fue nombrado Reserva de la Biosfera, un reconocimiento al nivel de conservación y variedad de sus especies animales y vegetales.
Una de las mejores formas de descubrir esta diversidad y dejarnos embaucar por la magia de sus paisajes es acudir a cualquiera de los 31 miradores que hay por toda la isla y a los que se puede llegar mediante rutas de senderismo o mountain bike.
Las mejores playas
En Gran Canaria encontramos nada más y nada menos que 60 kilómetros de playas repartidas en más de 230 kilómetros de costa. Dieciséis de estas playas cuentan con la Bandera Azul de la Fundación Europea de Educación Ambiental lo que está indicando no solamente la excelencia de la calidad de sus aguas sino también su idoneidad para la práctica de deportes acuáticos y, por supuesto, para bañarse.
También tienen banderas azules los puertos deportivos de Pasito Blanco y Mogán. El Centro de Interpretación Reserva Natural de las Dunas de Maspalomas cuenta con el galardón europeo Centro Azul y el sendero de la Bahía del Confital y la Playa de las Canteras tienen el galardón Sendero Azul.
Ocio y cultura para todos
Además de la playa y el deporte al aire libre, Gran Canaria nos ofrece también la posibilidad de dedicar tiempo al ocio cultural de diversos tipos que podemos disfrutar en familia. Entre otros lugares podemos visitar el Centro Atlántico de Arte Moderno, el Museo Canario, la Casa de Colón, la Casa Museo León y Castillo, la Casa Museo Tomás Morales, la Casa Museo Benito Pérez Galdós o el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología. Pero además, también es posible asistir a todo tipo de eventos como el Festival Canarias Jazz & Heineken o el Festival de Música de Canarias.
Una excursión muy recomendada es ir a visitar la Cueva Pintada de Gáldar, el mayor conjunto cultural y artístico prehispánico de las Islas Canarias. Esta cueva cuenta con pinturas rupestres en su interior que, junto con otros vestigios, ayudan a comprender cómo era la vida de los primeros habitantes del lugar.
Y no podíamos dejar de hablar del barrio de Vegueta, el centro cultural de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria y lugar en el que podremos visitar la Casa de Colón. Allí, además de aprender acerca de la vida y gestas de este navegante, descubriremos objetos que tienen relación con lo que se llamó el Nuevo Mundo, es decir, el continente americano.
Todos los domingos tenemos la oportunidad de visitar un mercadillo en el que se exhibe la artesanía de Gran Canaria, en especial la cestería tradicional. También podemos aprovechar para probar el dulce de batata o el redondo pan dulce que se hace allí mismo delante de nuestros ojos.
Excursiones en familia
Si hay algo divertido que hacer en Gran Canaria es salir de excursión todos juntos para crear nuevos recuerdos en familia que nos acompañarán para siempre. Visitar zoológicos,
jugar en parques acuáticos, pasear por jardines botánicos o hacer excursiones en camello o en barco para ver cetáceos son algunas de las opciones que tenemos para pasar momentos muy divertidos con los más pequeños de la casa.
De hecho, esta última actividad es una de las que más divierten a los pequeños. En el sur de la isla podemos subir a bordo de un barco que navega por las zonas frecuentadas por los delfines para verlos en su hábitat natural. Nos acompañarán expertos que nos irán contando lo que sucede en todo momento y a nuestros hijos les encantará ver cómo los delfines nadan y saltan alrededor del barco.
Una de las mejores propuestas en este sentido es visitar el Acuario Poema de Mar, un gran espacio recreativo con tres zonas diferenciadas en el que caben hasta 350 especies de animales.
Una ocasión para hacer deporte
El clima de Gran Canaria, su orografía y sus paisajes permiten que se puedan practicar diversos deportes a lo largo y ancho de toda la isla. No hace falta que seamos adeptos al deporte ni tener mucha experiencia; encontraremos monitores y profesionales que nos acompañarán y nos enseñarán a manejarnos para poder disfrutar al mismo tiempo que aprendemos.
En la costa podemos dedicarnos a la pesca deportiva, al surf, a la vela, al windsurf, al kitesurf o a las motos acuáticas, por poner algunos ejemplos. Además, los preciosos fondos marinos de la isla invitan a la práctica del buceo incluso aunque no lo hayamos hecho nunca. Merece la pena sumergirse bajo las aguas para descubrir los diversos peces y especies vegetales que pueblan el suelo del mar.
Y si queremos salir del agua un rato, los montes y barrancos de Gran Canaria se convierten en un inmenso gimnasio al aire libre en los que hacer deporte en familia al aire libre. De hecho, son muchos los deportistas de élite que escogen Gran Canaria como base de su entrenamiento por la posibilidad de practicar deporte en la naturaleza durante todo el año gracias a su clima.
Los paisajes de Gran Canaria nos permiten realizar actividades como senderismo, montar en bicicleta o incluso escalada si somos más atrevido y nuestros hijos son algo más mayores.
Mirando el cielo
Cuando cae la noche, continúa la diversión y la magia en Gran Canaria. La isla ha sido declarada Destino Turístico Starlight por UNESCO. El astroturismo es una nueva opción de ocio en Gran Canaria que permite descubrir y disfrutar los cielos nocturnos, algo que conlleva la lucha contra la contaminación lumínica para poder ver las estrellas sin problemas.
Las Islas Canarias son de los pocos lugares del mundo, junto a Hawai, Nueva Zelanda y Chile, que ha sido considerado por la UNESCO como una ventana al cielo por la calidad y nitidez que existe para la contemplación de las estrellas, algo que actualmente no es tan sencillo debido a la iluminación nocturna de las ciudades. Por ello, si visitamos Gran Canaria, tenemos que aprovechar esta oportunidad de observar las estrellas del mismo modo en que lo hacían los aborígenes.
Saboreando Gran Canaria
El principal atractivo de la gastronomía de la isla se basa en sus productos frescos locales. Por supuesto, no tenemos que dejar de probar las papas arrugadas con mojo dulce o picante, el sancocho y sus potajes y caldos de sabores tan intensos y especiales. Podemos acompañar esta comida con cualquiera de los vinos locales con Denominación de Origen sin dejar a un lado los deliciosos quesos de la isla y sus postres.
Pero esto no es todo. También podemos probar el café que se produce en el Valle del Agaete, uno de los pocos que se cultiva en Europa, o acudir a las bodegas del Ron Arehucas, las más antiguas de su especialidad que existen en todo el continente. Además, si decidimos recuperar fuerzas en alguno de los restaurantes que hay en la costa, tendremos la oportunidad de probar el mejor pescado fresco del Atlántico.
Por último, el buen clima de Gran Canaria permite la producción de alimentos como el famoso tomate canario, las manzanas, las frutas tropicales, las aceitunas, los plátanos dulces o las naranjas.
Alojamientos familiares
En Gran Canaria existe una constante preocupación por cambiar, mejorar y adaptarse a las necesidades de los turistas que llegan a la isla al mismo tiempo que integran las últimas novedades tecnológicas y de diseño. Uno de los hoteles históricos de Gran Canaria es el Hotel Santa Catalina, abierto desde el año 1890.
En Arucas ha abierto sus puertas recientemente el Hotel Emblemático que se sitúa en un edificio que tiene más de cien años de antigüedad en el centro histórico de la ciudad. Es un establecimiento bien preparado para recibir a las familias ya que proporcionan cuna para los bebés, videos para niños en las habitaciones y además, hay parques cercanos para salir a dar un paseo y a jugar sin alejarnos demasiado. Su trato personalizado hará que nos sintamos como en casa.
El Radisson Blu Resort & Spa Gran Canaria Mogán es otro de esos hoteles en los que nos vamos a sentir muy cómodos con nuestros hijos ya que hay clubs pensados para ellos con actividades divertidas en los que, además de pasárselo bien, conocerán a otros niños de su edad con los que jugar mientras nosotros nos relajamos. Este alojamiento tiene una categoría de cinco estrellas y cuenta con 342 habitaciones y 80 suites con terrazas privadas desde las que disfrutar de la brisa que viene del mar.
Sin embargo, no todo son hoteles en Gran Canaria. También podemos decantarnos por una casa rural, bungalows o apartamentos en el caso de que elijamos movernos con más independencia por la isla.