El verano pasado, fruto de un acuerdo con Luxotour, hicimos un viaje a una zona nueva de playa que se ha potenciado mucho en el norte de Marruecos, cercana a la frontera con Argelia. Su nombre, Saídia. En el país es conocido como La Marbella de Marruecos. Salvando las distancias, lo que sí es verdad es que está planificada y ejecutada esa potenciación turística con cabeza, no es una explotación salvaje de la costa.
Ramadán
Nosotros fuimos en Ramadán, que es la festividad musulmana que consiste en que durante todo el tiempo que el sol esté en el firmamento, no se puede ni comer ni beber.
La duración del Ramadán es todo un mes lunar, y va cambiando de fecha, adelantándose unos días cada año. Cuando nosotros fuimos pillaba el verano en pleno, pero como cada año se va adelantando, hay que consultarlo. Por lógica, cuanta más horas de luz haya, más duro es para los que hagan estrictamente el ayuno.
Aunque podamos pensar que al ser nosotros no musulmanes no nos afecta en nada, no es así. En primer lugar, porque los trabajadores de los hoteles sí son musulmanes y guardan ayuno, lo que hace que esté menos eficientes y más irritables, porque o no han dormido bien, ya que la vida en Marruecos se vuelve nocturna, o tienen hambre y sed. Y normalmente ambas cosas.
En segundo lugar, casi todos los restaurantes que no sean los del hotel están cerrados. Por lo que la oferta gastronómica se reduce drásticamente.
En tercer lugar, conducir o ir por carretera es un poco más peligroso, porque muchos conductores están cansados y más irritables.
En contrapartida, también tiene cosas positivas. Como que los hoteles son más baratos y están menos llenos. Porque La Marbella de Marruecos recibe turistas de todo el mundo musulmán, y aunque no está prohibido por la ortodoxia musulmana el viajar, sí es verdad que hacerlo en una época en la que las actividades está un poco limitadas, pues es un poco tonto.
De todas maneras, a nosotros no nos afectó demasiado, y además pudimos asistir a la explosión de actividad que ocurre en los países musulmanes cuando anochece y todo el mundo sale a la calle a disfrutar y vivir.
Cómo llegar
A Saídia se suele llegar por carretera desde Melilla o Nador. Que es la población junto a Melilla de Marruecos, con la que comparte puerto. Según parece, hay planes de desarrollar un gran aeropuerto en la zona de Saídia, pero eso son planes, y como ocurre en los países de Africa, ese tipo de cosas lo mismo tardan veinte años que se realizan de un año para otro.
Para llegar a Melilla-Nador, hay dos formas, en barco y en avión. La idoneidad de una u otra, depende de muchos factores. Hasta hace poco, Trasmediterranea tenía un ferry de alta velocidad que en tres horas te ponía en Melilla desde Málaga. Pero sólo operaba en verano y no hay garantías de que lo vuelvan a poner. Por lo que la alternativa marítima es un ferry clásico de una noche entera.
En barco desde Motril también hay ferry. En avión, desde Málaga se puede ir en poco tiempo, pero es un avión pequeño de hélice, con lo que eso conlleva para los que no les gusta volar.
Si vamos en barco con nuestro coche, hay varias recomendaciones muy importantes.
En primer lugar, paciencia a la hora de cruzar la frontera. Lo mejor es informarse de las horas de menor afluencia e intentar aprovecharlas. En segundo lugar, hay que conducir con mucha precaución, porque aunque no sean ciertas la mayor parte de las leyendas urbanas en cuanto a la conducción en Marruecos, no es conveniente tener ningún tipo de incidente al volante.
Y en tercer lugar, echar gasolina solo en gasolineras oficiales. Esto nos puede parecer un consejo un poco extraño, pero es que en Marruecos, y mucho más en la zona de Saídia, hay muchísimo combustible de contrabando, por la cercanía con Argelia. Todos esos burros y asnos que nos encontramos en los márgenes de la carretera, pertenecen a contrabandistas que por la noche cruzan la frontera clandestinamente y traen combustible desde Argelia. Aparte de ser ilegal, la calidad del producto puede ser ínfima, con lo que dañaríamos el motor de nuestro coche. No es que se rompa con sólo repostar, pero la cantidad de basura que meteríamos en el circuito, nos podría pasar factura más adelante. Si el coche es alquilado o nos lo ha dejado nuestro cuñado plasta, se podría estudiar usar ese tipo de gasolina.
De todas maneras, si podemos tener los desplazamientos con una agencia seria, yo no me plantearía el llevarme mi coche. Porque entre lo que cuesta embarcarlo y los posibles inconvenientes, no creo que merezca la pena.
Las playas
Las playas son una autentica maravilla. Además, como el modelo de desarrollo turístico elegido no es invasivo, creo que va a ser algo que se va a mantener en el tiempo.
En Saídia hay pocos hoteles, y las edificaciones para particulares son casa, nada de bloques de muchas plantas con mucha gente, lo que hace que incluso en las épocas de mayor afluencia de visitantes, las playas estén con poca gente. No es que sea desértico, pero incluso menos gente que en las playas del caribe, y eso que allí muchas son privadas.
Los hoteles no tienen actividades acuáticas propias, pero cada vez más hay pequeñas empresas que ofertan sus servicios para que los turistas disfruten de ese tipo de actividad a unos precios razonables.
La limpieza del agua es muy buena, y la morfología del fondo hace que sea muy apropiada para familias. Me explico. No hay rocas y hay que andar mucho para que cubra el agua, por lo que son muy seguras. Evidentemente, si te vas muy lejos, el agua te cubre y te puedes ahogar, pero hay margen de seguridad.
En cuanto a la temperatura del agua, a nosotros nos gustó mucho. Sin llegar al extremo de no refrescar, como ocurre en algunas playas del caribe en verano, no estaba fría. Se podría decir que es la temperatura amable, que contenta tanto a los amantes del agua fresquita y a los que prefieren el caldo de puchero.
El tiempo
En Saídia la temperatura es varios grados más suave que en el interior. Por lo que si planificamos una excursión, deberemos de tener en cuenta este dato. Tanto para planificar el horario, evitar las horas de mayor calor, como para la ropa y agua que hay que llevar. Máxime, porque la mayor parte de los taxis, no usan aire acondicionado.
Buenas playas
Las mejores playas son las de Saídia, por lo que no merece especialmente la pena ir a otras playas cercanas. Alguna hay virgen o semivirgen, pero el trabajo de llegar hasta allí, y luego no tener ni socorrista ni ninguna infraestructura, lo desaconsejan para familias con niños. Distinto es si nuestra familia es un poco más aventurera y nos gusta ver playas solitarias y vírgenes. Pero si los niños no son muy grandes, yo aconsejaría quedarnos en la playa cercana del hotel.
Luxotour
Para decidir en qué hotel quedarnos, lo mejor es preguntarle a la agencia, en nuestro caso fue Luxotour, qué hotel es el más interesante. No hay que hacer caso de comentarios de webs que sean antiguos. Ni en positivo ni en negativo. Porque al ser gerenciado los hoteles, de un año a otro pueden cambiar mucho, es por ello que lo mejor es preguntarle a gente con experiencia. Un buen síntoma es que no haya cambiado de gerencia (cadena hotelera) en un tiempo.
Experiencia
Otro de los motivos para contar con agencias con experiencia como Luxotour, es por su ayuda y experiencia a la hora de pasar la frontera con Marruecos. No es que nos vayan a poner una alfombra roja los gendarmes de Marruecos, pero tienen experiencia y saben cómo minimizar los tiempos de espera.
Red móvil
Muy importante el fijarnos qué red móvil estamos usando. Cuando entramos en Marruecos, nos conectaremos a una red de allí. Pero al estar Saídia tan cerca de Argelia, en las excursiones puede que nos salte a una red argelina, más cara. Y a la vuelta a Melilla, no por pasar la frontera volveremos automáticamente a nuestra red móvil española, hay que cerciorarse, y si no ha cambiado, hacerlo manualmente. Porque hay gente que llama a su casa justo al volver a Melilla, y nos se dan cuenta de que siguen realizando llamadas internacionales.
Regalos
Aparte de los típicos regalos que se pueden comprar en Marruecos, tipo ropa o artesanía, hay otro tipo de cosas que se puede llevar para regalar. Se trata de tabaco. Y vaya por delante que desaconsejamos profundamente ser5 fumador, por los graves problemas de salud que acarrea serlo. Pero, si como es mi caso, mi suegro es fumador empedernido y es lo único que quiere que le traigamos en los viajes… En Marruecos es más barato. Pero debemos de tener cuidado, porque nos pueden vender un tabaco aún más barato. Se trata de tabaco argelino. El problema no es sólo que es aún más dañino para la salud, es que es de contrabando y no es legal.