Primavera es un buen momento para visitar Las Palmas de Gran Canaria. A la buena temperatura, ya de por sí habitual, se añaden atractivos propios de la época y algunas novedades, entre las que destaca, la apertura de un sendero de 8 kilómetros que conecta el casco histórico con el Jardín Canario, un amplio programa de actividades para celebrar el Día de Canarias con artesanía y folclore y el atractivo perpetuo de la playa de Las Canteras.
La capital canaria ofrece, además, una oferta gastronómica de calidad que se puede disfrutar en sus establecimientos de primera, cultura para toda la familia, deportes al aire libre, en especial aquellos relacionados con el mar como surf, piragüismo, snorkel o vela con el arranque de la temporada de vela canaria y un patrimonio de más de 500 años de antigüedad que alcanza su máximo esplendor en barrios como Vegueta o Triana.
Por todos estos motivos, mayo y sobre todo algunos de sus puentes son un buen momento para visitar Las Palmas de Gran Canaria que ha apostado por el lema «22º de vida. Regálate Buenos tiempos»
El barrio de Vegueta
Vegueta, el barrio histórico, adquiere en esta época un sabor especial, aunque de día siempre deslumbra la belleza de su entorno arquitectónico, de noche tiene una luz única que adorna cualquier cena en los numerosos restaurantes y bares que lo salpican. Indispensables aquí son las visitas a la Casa de Colón, el Museo Canario y las Casas Consistoriales. Callejear por sus calles y plazas peatonales supone un singular viaje en el tiempo. De día o de noche, la cocina internacional o la nueva cocina canaria son siempre tentaciones que quedan al alcance para el viajero, que puede pasear en un clima amable, que invita a entregarse a la vida urbana al aire libre.
Ciudad de Mar
Las Palmas de Gran Canaria es sobre todo una urbe marinera, con cinco playas que bañan sus costas. La principal, Las Canteras: un parque temático natural que disfrutan sus ciudadanos durante todo el año, y que se disfruta por parte del visitante durante cualquier época. En primavera, el turista puede abandonarse al tradicional sol y playa en plena ciudad, pero también puede practicar deportes, en la zona de la Peña La Vieja (snorkel protegido por la barra) o en el extremo de La Cícer (fútbol, tenis.. o surf), junto al populoso barrio de Guanarteme y el Auditorio Alfredo Kraus. Ambiente surfero y joven en este extremo de la playa, que a lo largo de toda su avenida ofrece también una variedad considerable de restaurantes y terrazas en los que disfrutar de descansos con encanto y buena mesa. Internacional o local.
El Confital, en la otra punta de Las Canteras, regala otras postales: las propias de un paraje natural imponente, también objeto de visita por parte del aurífero más recalcitrante. Su singular ola, su paseo agreste y las vistas que se pueden contemplar de la ciudad desde aquí invitan a recorridos inolvidables al atardecer.
Las Alcaravaneras, La Laja y San Cristóbal completan la relación de playas de la capital grancanaria. En Alcaravaneras lo propio es practicar deporte, también en el agua. En el barrio marinero de San Cristóbal es imprescindible la escala en sus restaurantes con sabor a mar y la postal junto a sus casas de llamativo color. Y en La Laja sorprenden sus piscinas naturales. Todos estos puntos pueden ser alcanzados en un paseo en bici a lo largo de la avenida marítima, en línea recta y acompañando esta impagable fachada al océano que tiene la capital grancanaria.
Además, en estas fechas se inician las tradicionales regatas de vela latina, un deporte con identidad propia que aprovecha los famosos vientos alisios para llenar el paisaje marítimo con el colorido de las velas.
Jardín Canario y el Guiniguada
Las Palmas de Gran Canaria presume de rutas en plena naturaleza: senderismo en el Barranco del Guiniguada, la Caldera de Bandama o el Jardín Botánico Viera y Clavijo (el popular Jardín Canario) son atractivos que seducen a cualquier viajero con la flora en pleno ciclo de eclosión. Entornos que nunca defraudan por su riqueza paisajística y su ambiente que permite sentirse en plena naturaleza en el entorno cercano de la gran ciudad. Excursiones además muy accesibles desde el centro urbano, que siempre regalan como premio una fotografía indispensable para adornar la escapada con el contacto con la naturaleza.
Además, hace unas semanas la capital grancanaria cuenta con un nuevo atractivo: un sendero que conecta la parte antigua de la ciudad con el Jardín Botánico, ideal para recorrer tanto a pie como en bicicleta.
Arquitectura racionalista
La ciudad tiene en Ciudad Jardín (el barrio de los ingleses) uno de sus tesoros. Su patrimonio arquitectónico, digno de ser contemplado en un paseo calmado, que nos lleva desde el Pueblo Canario, hasta el barrio de Alcaravaneras, está firmado por el arquitecto Miguel Martín-Fernandez de La torre, hermano del artista Néstor, otro de los símbolos de la capital.
El estilo Bauhaus, la escuela de los grandes arquitectos alemanes del S.XX, encuentra aquí uno de sus rincones en el mundo.
La agenda de mayo
En mayo, además, Las Palmas de Gran Canaria celebra distintos eventos que acaparan la atención del público local y de gran número de visitantes. El Rally Islas Canarias, que aglutina a más de un centenar de inscritos de casi una veintena de países distintos, se celebra entre el 4 y el 6, con el entorno de Santa Catalina como epicentro de la prueba.
Pocos días después llegan a Las Palmas de Gran Canaria once grandes veleros que participan en la Rendez-Vous 2017 Tall Ships Regatta: grandes navíos que participan en una travesía transatlántica que conmemora el 150 aniversario de Canadá, y que hacen escala en el Muelle Santa Catalina y el Muelle Deportivo.
La parada de los veleros es un anticipio de la Feria Internacional del Mar de Las Palmas de Gran Canaria: FIMAR 2017, que celebra una nueva edición del 12 al 14, también con Santa Catalina como centro (la Plaza de Canarias y el Muelle Santa Catalina).
Mayo se cierra con la celebración del Día de Canarias (el 30), en unas jornadas que rebosan de celebraciones en torno a las celebraciones canarias. Bailes folklóricos, degustaciones y menús con cocina tradicional y encuentros que también vive la ciudad en su centro urbano.