Con la llegada del buen tiempo, llegan las vacaciones y la exposición solar. Por eso, es importante cuidar la piel para prevenirla de los rayos solares, pues el impacto que estos ejercen en la piel aumenta con la temporada estival. Según datos del informe ‘Hábitos de fotoprotección’, realizado por el Laboratorio Farmacéutico Español IFC, solo 1 de cada 10 españoles tiene buenos hábitos frente la exposición solar, pese a que más del 90% de los especialistas recomiendan el uso de protectores solares con FPS 50+.
Esta realidad pone énfasis en la necesidad de concienciar a la población sobre la importancia de adquirir hábitos saludables en este aspecto, puesto que el informe muestra que 2 de cada 5 personas ha sufrido quemaduras solares graves. Además, más de la mitad de los jóvenes no se reaplica la crema solar durante el día. Por eso es relevante sensibilizar a los jóvenes para prevenir posibles efectos adversos e incluso desarrollar un problema cutáneo de gravedad en un futuro.
En este ámbito, cabe remarcar que, si bien aplicarse fotoprotector en verano es indispensable, este es un hábito que se debería llevar a cabo durante todo el año, según los profesionales del ámbito. En esta línea, cabe remarcar que solo 1 de cada 4 personas mayores de edad nunca han visitado un dermatólogo. Desde CEAC, centro de formación profesional, enfatizan la importancia de incluir las visitas rutinarias al dermatólogo como mínimo una vez al año, más si se detecta cualquier tipo de cambio en lunares o pecas.
Cinco consejos indispensables para cuidar la piel frente a la exposición solar
El sol tiene múltiples beneficios para la estimulación de la vitamina D de nuestro organismo, pero no hay que olvidar que también existen riesgos al exponernos a los rayos UV, que, si no conocemos, pueden resultar perjudiciales para la salud. Por eso, CEAC presenta cinco consejos fáciles de realizar para preparar la piel para la época estival.
1. Tener en cuenta la alimentación y la hidratación.
Es importante ingerir verduras y frutas ricas en antioxidantes que contengan betacarotenos y vitamina C, tales como la zanahoria, el kiwi, el melón, los tomates… Además, para mantener la hidratación, es clave beber dos litros diarios de agua.
2. Incluir una rutina de exfoliación en el día a día.
De cara a preparar la piel ante el impacto del sol, es imprescindible exfoliarla para eliminar impurezas y células muertas. De esta manera se renueva la epidermis y el bronceado será más intenso.
3. Sombreros y gafas de sol, unos buenos aliados.
Las viseras, gorras, sombreros, gafas de sol, etc. son complementos que ofrecen una mayor protección facial ante el sol, evitando así manchas y quemaduras indeseadas.
4. Evitar el uso de perfumes.
Este consejo no es muy popular, pero puede resultar efectivo. Evitar usar perfumes durante la exposición solar puede prevenir la aparición de manchas o posibles reacciones alérgicas.
5. Controlar la hora de exposición solar.
Es importante no exponerse al sol durante las horas centrales del día, es decir, entre las 12h y las 16h. La mejor hora para empezar a ir a la playa y tomar el sol puede ser a partir de las 18h, cuando la radiación solar ha disminuido.