Con el objetivo de lograr una mayor desestacionalización del consumo turístico interno, el gobierno de Canarias ha ampliado el plazo de emisión de bonos turísticos hasta diciembre, movilizando así el mercado interior hasta finales de año, momento en que se espera la recuperación gradual del turismo extranjero.
A día de hoy se han emitido más de 36.000 de las 50.000 tarjetas bono, de las que más de 21.000 corresponden al consumo directo en alojamientos y más de 15.000 al consumo en agencias de viajes de Canarias.
Se han activado la mayoría de estas tarjetas con un saldo de más de 6.130.000 euros, una cantidad a la que los beneficiarios han agregado ya un importe global de casi dos millones de euros. De esos más de ocho millones de euros activados y en proceso de consumo, casi tres millones han sido ya totalmente consumidos.
Una inversión histórica para impulsar el turismo interno
Para impulsar las vacaciones de los residentes canarios en el archipiélago se ha hecho una inversión histórica de 16 millones de euros con una estrategia que se ha asentado sobre cuatro pilares: una campaña de comunicación para el turismo interno con una partida económica sin precedentes de un millón de euros, con el eslogan ‘Somos afortunados’; el bono turístico de alojamientos y el de agencias de viajes, con 5 millones de euros cada uno; y la línea de estímulo a las actividades complementarias, actualmente en desarrollo, con 4,6 millones de euros.
Un total de 50.000 familias canarias accedieron a una de las dos modalidades de los bonos turísticos. Esta medida puede haber tenido un impacto en la decisión de optar por el turismo interior en alrededor de 200.000 personas, si se tiene en cuenta una familia tipo de cuatro miembros para aproximar la cifra, y dado que el grueso de beneficiarios viaja acompañado de familia o amigos.