La gastronomía sin duda ha invadido nuestras vidas, forma parte destacada en cualquier viaje y es el plan perfecto para un fin de semana en pareja o con amigos, como curiosidad, en toda nuestra vida pasaremos casi cuatro años completos comiendo, y claro, en la variedad está el placer.
Además, la gastronomía es también un estupendo regalo en cualquier celebración o para hacérselo uno mismo, en cada ciudad hay cientos de tiendas gourmet y restaurantes a los que ir. Y esta tendencia por hacer planes gastronómicos va cada día va a más, de hecho, según datos de la web de regalos experiencias https://www.aladinia.com, la demanda de experiencias gastronómicas ha aumentado un 60 % en los últimos meses. Por ello, sus expertos han seleccionado algunas de las formas más originales de disfrutar la gastronomía con un plus añadido al simple hecho de comer o cenar:
1. Disfrutar de una estrella Michelin no es tan caro
Comer (o cenar) bien es importante y más si se puede hacer en un restaurante con estrella Michelin a buen precio, pero, si además se disfruta de un entorno envidiable próximo al Delta del Ebro, la experiencia es única. Eso es lo que propone el chef con una estrella Fran López, junto con su hermano Joaquim, en su restaurante Villa Retiro en el hotel del mismo nombre, en Xerta, Tarragona. Rodeado de jardines con árboles tropicales y una cascada de agua con un pequeño lago, propone diversos menús degustación, con una cocina basada en el producto y el mercado, con toques de innovación sin perder la esencia de la cocina tradicional. Por ejemplo, uno que incluye tres aperitivos con sugerencias tan originales como Crujiente de morcilla de Tortosa, Flor de calabacín crujiente con sobrasada y miel o Takoyaki de pies de cerdo; dos entrantes y como plato estrella uno de sus exclusivos arroces, que bien podría ser el Arroz de mandongo, con arroz bomba del Delta, cocido meloso con partes típicas de la elaboración de la matanza del cerdo. Con postre y una copa de vino cuesta tan solo 72,50 euros por persona.
2. Un lugar para “ponerse ciego” a comer
Perdón por el pequeño chiste, pero es que, lo que propone Dans Le Noir junto al Palacio Real de Madrid es justamente comer literalmente a ciegas, de forma que todos los sentidos, menos el de la vista, se agudizan creando miles de sensaciones nuevas. El personal de la sala es invidente por lo que se crea también una experiencia humana y social. No es raro que el local haya sido elegido entre los 10 restaurantes más originales de Madrid. El menú es sorpresa, como casi todo en este lugar, no se elige lo que se degustará en la oscuridad, simplemente se dice lo que no se puede comer y ellos adaptan el menú para que la experiencia sea completa y segura, basándose en aromas, texturas, olores y sabores pero sin ver lo que se come… hasta el final en que muestran fotos de lo servido. El menú degustación consta de un entrante, un primer plato, un segundo plato y postre. Incluye una copa de cava y tres copas de vino o refresco y cuesta 64,90 euros por persona.
3. Ver lo que comes pero sin saber dónde
En línea con lo anterior está la experiencia cuyo nombre es: “Cena clandestina en Barcelona”. Se trata de elegir la fecha en la que se quiere cenar pero sin saber dónde hasta el mismo día. Para poder adivinarlo hay que resolver una serie de pistas y enigmas que se reciben unos días antes. También el menú es secreto, pero se trata de un menú degustación de alta cocina con maridaje. Tras la copa de bienvenida se revela lo que se va a disfrutar, con entre 10 y 12 platos (según temporada) de base mediterránea con toques vanguardistas y de otras cocinas que se comparte con un grupo reducido y exclusivo y con un chef privado toda la noche al que se ve cocinar en directo en formato showcooking. El precio por persona es de 75 euros.
4. Primero un relajante spa y luego una cata de vinos con aperitivos… o al revés
Para los que les interesa el mundo del vino, pero también disfrutan del agua, sobre todo en un relajante spa, la propuesta que hace https://www.aladinia.com uniendo a las Bodegas Javier San Pedro Ortega y al hotel Sercotel Villa de Laguardia 4* es perfecta. Se puede empezar en el espacio Wine Oil Spa del hotel, situado en el Laguardia, el pueblo natal del célebre Samaniego y sus fábulas; su circuito hidrotermal con más de 1.000 metros cuadrados incluye una piscina central con chorros, tumbonas, jets para las piernas, picos de pato, geissers, bancos de hidromasaje a diferentes alturas y pileta de agua fría para la inmersión final, además de baño turco, sauna finlandesa, jacuzzi y muchas otras instalaciones. Tras hora y media de relax y bienestar toca visitar la bodega (o al revés) de una forma original y muy amena, y luego catar seis de sus vinos más emblemáticos acompañados de aperitivos que elaboran los chefs Iñaki Murúa y Carolina Sánchez, cuyo restaurante Ikaro de Logroño cuenta con una Estrella Michelin y 2 Soles Repsol. La experiencia completa para dos personas cuesta 80 euros.
5. Cenar en mitad de una acuario rodeado de peces
Sin duda se trata de uno de los planes más originales y sorprendentes, cenar en medio de un acuario rodeado de peces ya es posible en el Restaurante Submarino Oceanogràfic de Valencia. Donde, en un ambiente acogedor y relajado, se podrá disfrutar de un exquisito menú degustación con platos basados en la cocina fusión Mediterránea. Una manera muy original de pasar una agradable velada en el edificio más emblemático del Oceanogràfic, con su impresionante cubierta y la lámpara central que representa un banco de medusas. Mientras se cena, en todo momento se podrán contemplar los peces que, por todas partes, rodean al restaurante formando un espectacular acuario circular. El menú consta de un aperitivo de la casa, unos entrantes a base de ostra Guillardeau con manzana y sidra, pulpo a la parrilla con parmentiere de patata y arena de pimentón y foie asado a la sal de maíz, pasas y PX, a continuación se podrá degustar merluza de pincho con pesto de tirabeques y tallarines vegetales y lomo de ternera a la parrilla con ñoquis y chips de patata ratté, y para finalizar 100 % al cacao en una copa y lingote dorado de plátano con canela, toffee y vainilla. Este espectacular menú tiene un precio de 55 euros por persona, 70 euros si se quiere con degustación de vinos.
6. Convertirse en maestro del sushi y luego disfrutarlo
La empresa Recetas Selectas propone cursos, y catas de lo elaborado, de cocina japonesa, india, tailandesa, etíope, griega e italiana, entre otros. En solo tres horas se aprende, por ejemplo, a elaborar sushi con diferentes arroces y técnicas en grupos, de cómo máximo 12 personas, incluso niños mayores de 12 años. Se puede descubrir el mundo de la cocina japonesa y comprobar que no es complicado. El truco está en cocinar el arroz en su punto adecuado, tanto el japónico, con una textura única y un poco pegajosa, como el basmati, caracterizado por tener un grano largo, el chef nos enseñará a dominar la cocción tanto a la manera tradicional o con la arrocera al vapor. Preparado el arroz hay que saber manipularlo para hacer las diferentes piezas de sushi: maki, futomaki, uramaki y nigiri. Los sabores variarán según el día, desde los tradicionales como el atún, salmón o pepino hasta algunos más innovadores. Al final de las clases se podrá degustar el delicioso sushi preparado por uno mismo. El precio por persona es de 17 euros.
7. Regreso a la Edad Media y sus ricos sabores
La experiencia se inicia en el Palau Recasens, en la Plaça Sant Just de Barcelona, con una copa de cava de bienvenida. Tras visitar el Palacio del siglo XIV de la mano de historiadores que cuentan la fascinante vida de Isabel de Requesens, Virreina de Nápoles, y la misteriosa historia del palacio, se podrán presenciar algunos de los espectáculos de la época: luchas de caballeros, danzas con fuego, juegos malabares… Y luego… a comer, al estilo de la Edad Media, o sea mucho, pero con un toque moderno. Una idea del menú es: fruta fresca cortada, piment (bebida de vino especiado), ensalada de pato a la naranja, empanada de espinacas y piñones, freixals (crpe) de guiso de carne, ternera con canela, naranja y anís estrellado y, para terminar, coulant de almendra y miel sobre cuna de crema de avellanas. Todo bien regado con vino blanco, tinto y cava. La cena estará acompañada de una suave música palaciega, como un auténtico huésped de la Virreina. La experiencia que propone Aladinia.com, dura más de tres horas, se realiza los sábados, y cuesta 67,50 euros.
8. ¿Por qué no animarse a disfrutar un menú de 20 platos?
Situado en el centro de la villa medieval de Castelló d’Empúries (Girona), de gran valor histórico y junto al Parque Natural de los Aiguamolls, el hotel y restaurante Empòrium, que cuenta con una estrella Michelin y un sol Repsol, propone un menú nada habitual formado por 20 platos al sorprendente precio de 95,45 euros. Se trata de una cocina de mar y montaña sin renunciar a toques actuales, donde resaltan los sabores ampurdaneses, siempre en base a productos de proximidad y sostenibles. Vale la pena mencionar lo que incluye el menú «Mar i Muntanya» todo armonizado con una selección de vinos y de aceites del Empordà. La experiencia comienza con unos entrantes: granada con sidra del Empordà, pomelo y enebrina, cornet de zanahoria con finas hierbas i pimienta, patata ácida con mostaza, aceitunas negras y hierbas de garriga, polvorón de tomate seco con aceite de oliva y cilantro, roca de acelga rábano con zumaque y vinagre, avellanas y aceite de romero, troca de algas rojas y rabanillo, galleta de setas con queso fresco y pesto y por último corteza de cereales con pimienta roja y especias. Después se pasa a los platos principales: gambas blancas con calabaza, naranja y albahaca, morro de bacalao y porros con judías de santa pau, crestas de gallo y huevos de trucha y apio y pato de aglà a la reial y su jamón con anguila ahumada, boniato y nabos. Para finalizar, los más golosos podrán disfrutar nada más y nada menos que de ocho postres: limón con moras, yogur y menta, crema catalana y manzana verde con canela, carquiñol y moscovado, acanalado de ratafía del Empordà, carmelo blando de naranja, trencadís de chocolate rubí y caramelo de pimientas, chocolatina de almendras y piel de cítricos, chocolatina de pistachos salados, chocolatina de frambuesas y barquillo. Todo lo preparan los hermanos gemelos Màrius y Joan Jordà. Lo dicho, 95,45 euros por persona.
9. Cata de cervezas artesanas y almuerzo ligero por menos de 10 euros
Entre las ideas que propone Vendrell Gourmet, que apuesta siempre por los productos de su tierra valenciana en Favareta (Valencia), destaca la promoción de las cervezas artesanas que elabora Cervezas Génesis con componentes como son las naranjas de su propia producción, el azahar y el arroz con denominación de origen ‘Arròs de València’, además de cebada y malta. Para conocer todo el proceso de elaboración de sus singulares cervezas, proponen una visita a su fábrica seguida de una degustación de las distintas cervezas, caracterizadas por su sabor mediterráneo en el que destaca un toque de naranja y una pizca de azahar, repitiendo las veces que se quiera acompañadas de un ligero almuerzo con alimentos típicos de Valencia, como coca normal y de chocolate y coca de tomate, todo casero. Precio por persona 9,90 euros.
10. Spa, masaje y cena romántica sin salir del hotel
En el barrio más trendy de Barcelona en Poble Nou, se encuentra el hotel Pere IV, y en sus alrededores se mezclan tiendas tradicionales con start-ups y showrooms de artistas, nuevos edificios con bares de toda la vida y una rambla que conduce al Mediterráneo. La propuesta de https://www.aladinia.com empieza con un recorrido por el spa del hotel que consta de piscina interior con cascadas, sauna, baño de vapor, pediluvio, cabina de sal y duchas sensacionales al estilo tropical, nebulizante y secuencial para seguir con uno de sus masajes de 25 minutos a elegir entre distintas terapias. Ya con el cuerpo dispuesto, nada mejor que una cena gastronómica de inspiración mediterránea con toques de creatividad catalana, con varios entrantes a elegir, plato principal, postres, bebida y café. Por ejemplo como entrante puede ser Baos rellenos de tartar de roastbeef con mayonesa de kimchee y virutas de jamón ibérico; como principal Curry tai de pollo con gambas y arroz jazmin y para terminar Brownie de chocolate con salsa de chocolate blanco y frutos rojos. El precio por persona es de 59,95 euros.