Iglesias, un gran museo, ruinas romanas, una muralla bien conservada, casas solariegas, restaurantes y tiendas típicas, todo ello concentrado en un espacio no muy grande, hacen de Évora un sitio que hay que visitar.
No estaba previsto que los reportajes sobre el Alentejo comenzaran con uno de Évora, pero ha sido un sitio que nos ha gustado tanto que hemos decidido comenzar por esta ciudad Patrimonio de la Humanidad. Por cierto, quien defina Évora simplemente como “esa ciudad que está camino de Lisboa” demuestra un completo desconocimiento y grandes dosis de insensibilidad ante la belleza.
Évora fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986. Muy merecida esta declaración, tanto por su casco antiguo, como por las ruinas romanas, como por la belleza en sí de la ciudad. Conozcámosla más de cerca.
Las iglesias de Évora
Para un fanático como yo de la arquitectura religiosa, Évora es un regalo caído del cielo. Esas pequeñas iglesias, que muchas veces ni salen en las guías de viaje, son maravillosas. Y la Catedral, o “Sé”, es una de las maravillas escondidas que nos podemos encontrar y que nos dejan gratamente sorprendidos.
La Sé está construida con granito gris, y es una mezcla de románico y gótico, con una forma de fortaleza muy peculiar. Hay dos tipos de visitas, la de la iglesia más claustro, y otra que además incluye una torre y un museo. El claustro es muy divertido para los niños, ya que hay unas escaleras casi ocultas que llevan al tejado, aunque esto es algo que no se sabe al subir. Primero se sube por unas estrechas escaleras de caracol, y luego se descubre a dónde se va. La subida a la torre y al tejado está muy bien. Aunque esto lo digo por referencias de mis hijos, porque las alturas nunca han sido mi pasión. Por eso aviso a otros como yo, que la visita al claustro puede incluir esa pequeña excursión por el techo.
Superimpactante es la Capela dos Ossos en la Sao Francisco. Es una capilla de huesos de cadáveres de unos 5.000 monjes. Detalle de fino humor es la inscripción que se puede leer: “Nos ossos que aquí estamos, pelos vossos esperamos”. Que traducido es “los huesos que aquí estamos a los vuestros esperamos”. Eso es humor negro del bueno.
Roma
Para los que no fuimos damnificados por la LOGSE, Viriato es un nombre que nos trae muchos recuerdos. Así que al visitar Évora y ver las ruinas romanas, uno no puede dejar de recordarlo. Si Viriato hubiera ganado, hoy día no existirían esas ruinas, así que nuestra inicial pena por su derrota ante Roma, se ve mitigada viendo la magnificencia del legado romano. Ya puestos en faena, en vez de Gladiator, Hollywood podría haber hecho una película sobre Viriato.
Para los niños, todo el tema de los romanos y sus ruinas es siempre muy atractivo, con lo que Évora es un sitio muy indicado. El templo romano está bastante bien conservado, además está muy cerca de la catedral y hay un parque con un kiosco de helados cerca donde podremos descansar y hacer una pausa.
Gastronomía
Comer es siempre un gran placer en Portugal, más aún si cabe en el Alentejo. Platos contundentes en el interior, y más suaves con pescados y mariscos en las costas. En Évora podemos encontrar la mejor cocina y el mejor precio. No podemos dejar de probar los exquisitos postres alentejanos, ni de comprar para llevarnos a casa sus dulces. Los vinos también merecen nuestra “visita”. Fuertes y recios, ideales para carnes.
Algunas recomendaciones
Aparcar en una ciudad antigua y monumental en su casco antiguo siempre es difícil. Nosotros tuvimos la suerte de poder aparcar en una callejuela cercana a la plaza donde está la oficina de turismo. Hay que tener cuidado con las multas, ya que hay zonas reservadas a residentes y donde está prohibido aparcar. Ante la duda, lo mejor es preguntar a los comerciantes de la zona.
Pasear a pie es un placer en Évora. Nuestra recomendación es dar una primera vuelta por el casco antiguo, sin ruta definida, sencillamente paseando y disfrutando del entorno. Casas blancas, pequeñas iglesias, unas ruinas romanas, un parque con un mirador, etc. Pasear y disfrutar, luego ya se puede empezar la visita sistemática y organizada.
De compras
Las tiendas son sencillamente magníficas. No estamos hablando de las típicas tiendas de suvenires llenas de tonterías fabricadas en China. Hay desde maravillosos bordados y labores textiles, a cositas preciosas realizadas con corcho. El bolso realizado con un tipo de corcho flexible y ligerísimo que vimos en un par de tiendas, es de lo mejor que hemos encontrado nunca. En la Rua 5 de Outubro, podemos pasar horas viendo tiendas típicas con productos muy bonitos. No desaprovechar la ocasión y comprar dulces puede ser una gran idea.
DE UTILIDAD
Cómo llegar:
-En avión: TAP Portugal
-En coche: Lo más recomendable es tomar la E90.
-En tren: Existen trenes diarios desde Madrid, Vigo e Irún hasta Lisboa. Consulta la web de Renfe: www.renfe.es
Visado: Pasaporte o carnet de identidad
Moneda: Euro
Idioma: portugués
Religión: Católica
Voltaje y frecuencia: 230 V / 50 Hz
Clima: el clima del Alentejo se caracteriza por ser suave, sin temperaturas extremas y con una temperatura anual agradable.
Embajada de Portugal en Madrid:
Pinar 1, 28006 Madrid, España
Teléfono: +34 917 824 960 Fax: 917 824 972
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Portal oficial de turismo: www.visitportugal.com