Desde sus orígenes, Manises ha estado vinculada con la artesanía cerámica. Esta actividad es la que mejor define la historia de la ciudad y la que ha hecho que Manises sea conocida internacionalmente por sus lozas y azulejos de diferentes estilos elaborados desde el s. XIV. ¿Vamos a conocerla más de cerca?
Con la colaboración de la Comunitat Valenciana
La ciudad actual tiene su origen en la alquería islámica que el rey Jaime I entregó en 1238 a Artal de Luna tras la conquista de Valencia. Pronto pasaría a formar parte del patrimonio familiar de los Boïl, quienes promovieron el desarrollo de la artesanía cerámica e hicieron que Manises viviera una época dorada durante los siglos del XIV al XVI. Ya en el s. XIX la ciudad vuelve a ser pionera por la producción de azulejos y loza polícroma y en el siglo XX por la cerámica modernista.
Una ciudad de cerámica y azulejo
Estos más de 700 años de actividad ceramista han dejado su sello en la personalidad de Manises. Sus parques y calles se adornan con muestras de este arte y pasear por la ciudad es un regalo para la vista. Mientras caminamos por el casco antiguo veremos cómo nuestros hijos se sorprenden ante la variada decoración cerámica de sus edificios. Además muchos de sus parques presumen de su tematización cerámica como el Parque de Los Filtros o “El Boscany”.
Por ello, tenemos que ir a visitar el Museo de Cerámica, instalado en una antigua casona del s.XVIII y donde veremos una colección de la cerámica producida en Manises desde el s. XIV a la actualidad. Este año y por su 50 aniversario, organiza una gran variedad de actividades y exposiciones. Otro lugar que visitar es el MUMAF, Colección Museográfica de Fotografía de Manises “Carlos Sanchís”, ubicado en el Edificio El Arte, una antigua fábrica de cerámica con una vistosa fachada. Allí se exhibe una de las muestras de cámaras y material fotográfico más importantes de Europa.
Tenemos que hacer una parada en la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista para ver su cúpula única en el mundo cubierta de tejas con reflejo metálico. En su interior, destaca su zócalo de azulejería valenciana del siglo XVIII, así como otras muchas aplicaciones de cerámica del siglo XX en las capillas laterales que seguro que van a atraer la atención de nuestros hijos por sus formas y colores.
Además, en Manises podemos experimentar de primera mano la artesanía cerámica ya que se organizan una gran variedad de talleres en los que observar el proceso de elaboración de la cerámica tradicional y otros más participativos en los que tomaremos conciencia del valor y del trabajo que hay detrás de una pieza de cerámica de calidad.
Celebrando una tradición
La vinculación de la cerámica también se ve plasmada en sus fiestas. El 14 y 15 de julio se celebra la Festa de la Ceràmica, Fiesta de Interés Turístico de la Comunidad Valenciana cuyo objetivo es acercar la artesanía y las tradiciones a los que visitamos la ciudad. Los artesanos salen a la calle para mostrar cómo convierten la arcilla en un objeto artesano. Nos podremos llevar a casa nuestra propia creación o adquirir una pieza de cerámica artesanal en los puestos de los ceramistas. En la tarde del 18 de julio se celebra la Cavalcada de la Ceràmica. La Clavaría de las Santas Justa y Rufina, patronas de los ceramistas y de la ciudad, desfila por la ciudad obsequiando a todos los asistentes con piezas de artesanía local.
Pero Manises no sólo es cerámica. También ofrece actividades como deportes de aventura, rutas cicloturísticas y actividades de ocio ecológico en el Parque Natural del Turia. Y para reponer fuerzas, cuenta con una amplia variedad gastronómica y una oferta hotelera de calidad.
Más información:
Tourist Info Manises
Av. dels Tramvíes,15
46940 Manises