Verde, agua y piedra. Estos son los elementos que definen una de las rutas más bellas y acogedoras de España. La ruta de los molinos gallega es uno de los lugares de ocio más visitados y en el que, además de disfrutar del entorno, aprenderéis mucho sobre sus históricos molinos de agua.
La ruta de los molinos está cargada de senderos, ríos y de una vegetación exuberante. Te hace trasladarte a un mundo de calma y paz, hace descubrir nuevas experiencias a tus peques y, a los más mayores, les permite revivir tiempos pasados. Regálate un paseo único con tus hijos por lugares repletos de historia, vistas de ensueño, plantas autóctonas y diversidad de ecosistemas con riqueza de flora y fauna. Conocemos los molinos de agua de Ribadumia, Meis y Meaño.
Los molinos de agua, sus orígenes
Para hacer una ruta completa, es muy importante que sepamos un poco sobre ellos antes de encaminarnos entre sus senderos. En la antigüedad, el hombre siempre se ayudaba de su propia fuerza para llevar a cabo sus quehaceres diarios, sin embargo, esto cambió cuando empezó a aprovecharse el trabajo físico de los animales y, poco después, la energía hidráulica. La introducción de las maquinas para triturar y moler alimentos fue un gran avance para el ser humano, y la llegada del molino de agua fue revolucionaria. Además, se cuenta que ya lo utilizaban durante la época del romano clásico, y en algunas zonas del continente asiático.
La ruta de los molinos de Ribadumia
El vistoso río Umia es el protagonista del municipio de Ribadumia. A su ribera, podemos encontrar una serie de rutas perfectamente acondicionadas para pasear. Cuenta con numerosos molinos, fuentes y lavaderos, dentro de los que hay que destacar los famosos molinos de Barrantes y Batán. La ruta de los molinos de Barrantes nos lleva hasta el interior de la comarca del Salnés. Se realiza bordeando el río Rande o el de Batán, disfrutando de un paseo agradable repleto de flora y fauna autóctonas, contemplando los antiguos molinos y desembocando el sendero en una playa fluvial. La ruta de los molinos de Batán nos permite contemplar molinos recuperados recientemente, además, toda tu familia quedará enamorada del aroma limpio del lugar y de su variedad de ecosistemas.
La ruta de los molinos de Meis y Meaño
La ruta de Meis se caracteriza por ser un lugar que invita al tanto al interés por conocer la historia de sus molinos como al ocio. En la zona de molinos de Salcedas, tus hijos lo pasarán en grande gracias al baño que podrán tomar junto a los molinos. Se trata de una especie de cubo, en forma de piscina, lo que permite disfrutar de un chapuzón mientras hacéis la ruta. El municipio de Meaño también está cargado de historia gracias a los antiquísimos molinos que lo poblan, y que te trasladarán a épocas pasadas. Además, os sorprenderá por las magníficas vistas que combinan la belleza natural de su paisaje con un estupendo contraste de la típica imagen de los pueblos de la Galicia rural.
Así funcionaban los molinos
Aunque parezca un mecanismo sencillo, los molinos de agua tenían su misterio. El elemento clave que proporciona fuerza al molino es el agua, por lo que es este el motivo que explica porqué se construyeron junto a las riberas de ríos caudalosos. El agua entra por un canal, lo que hace mover el rodillo al chocar con las aspas. De esta manera, se produce un movimiento rotario que hace mover una pieza circular de piedra, llamada “moa”. El grano que cae, se deposita en una especie de caja o “moega” que baja por un canal donde será triturado. Gracias a este proceso, se puede ver moler el maíz y cómo fluye el agua contra el mecanismo que hace mover la enorme piedra que tritura el cereal.
Ideal en familia
La ruta de los molinos de Ribadumia es una ruta muy adecuada para realizar con niños. En este lugar encontraréis la famosa ruta de la piedra y el agua, un lugar mágico que encantará a tus hijos y que tiene como final del sendero al monasterio de Armenteira. Además, en la ruta de Ribadumia, los niños podrán entender y seguir más fácilmente lo que ven gracias a los cuadernos y guías de campo elaboradas especialmente para los más pequeños.