La extensa colección de castillos históricos que existen en España, convierte a nuestro país en uno de los más interesantes para visitar. De hecho, se calcula que a lo largo de todo el territorio nacional hay más de 20.000 castillos, de los que, aproximadamente, la mitad se conservan lo suficientemente bien como para visitarlos o disfrutar de su arquitectura. Quizás por eso no sorprenda que algunos de ellos hayan servido como localizaciones de películas y series inspiradas en la Edad Media.
Así, en España podemos disfrutar de impresionantes fortalezas y castillos, de diferentes estilos y épocas, que son fiel reflejo de siglos de guerras y que, en estos tiempos de pandemia, pueden ser la escapada perfecta para quien desee hacer turismo de interior. Si este es tu objetivo, no te pierdas la lista que ha preparado Indie Campers, una de las plataformas líderes de alquiler de autocaravanas y furgonetas camper en España y Europa, en la que recogen algunos de los castillos históricos más increíbles de España:
País Vasco: Castillo de butrón (Vizcaya). Este castillo, situado en Gatika y construido en el siglo XIII, presenta una arquitectura única en España ya que tras su remodelación, ordenada por el Marqués de Cubas en el siglo XIX, acogió el estilo neogótico, lo que le dio un aspecto de película Disney. La fortaleza, ubicada en lo alto de una colina, sobre rocas y rodeada de un bosque centenario, fue escenario de continuas luchas entre dos bandos de la nobleza de Bizkaia, desde el siglo XVI hasta principios del siglo XVI.
Castilla y León: Castillo de Coca (Segovia). Construido en el siglo XV y de estilo gótico-mudéjar, este castillo, ubicado en el municipio de Coca, es Monumento Histórico Nacional y Tesoro Artístico Español. Es considerado como uno de los castillos más hermosos de nuestro país gracias a su original conjunto arquitectónico, donde destacan la torre del homenaje, la mazmorra y sus salas, como la Sala de Armas, donde hay una bóveda de nervaduras góticas con impresionantes motivos geométricos mudéjares de estuco y pinturas. Además, es una de las pocas fortalezas de nuestro país que no se encuentra en un cerro, sino en una explanada a las afueras de la localidad.
Andalucía: Castillo de Almodóvar del Río (Córdoba). Esta fortaleza de origen árabe se construyó en torno al año 740 en la colina de la localidad de Almodóvar del Río con el objetivo de proteger la ciudad, situada junto al Guadalquivir. En su estilo arquitectónico se encuentran influencias de diferentes culturas como la musulmana y la cristiana, lo que hace de este castillo uno de los más interesantes de España. A lo largo de la historia, los muros del castillo de Almodóvar del Río no solo han retenido prisioneros en sus mazmorras y recogido el esplendor de la historia de España custodiando muchos tesoros de Castilla, sino que también han albergado la producción de películas y series de televisión ambientadas en la Edad Media como Juego de Tronos de HBO.
Navarra: Castillo de Olite. El Palacio Real de Olite fue uno de los castillos de Europa más lujosos y en él se celebraron justas, torneos, juegos de pelota e, incluso, corridas de toros. La fortaleza, construida entre los siglos XIII y XIV, perteneció a la corte del Reino hasta que ésta se unió a la Corona de Castilla. El castillo, que es Monumento Nacional, ha sufrido distintas transformaciones a lo largo del tiempo. Así, existe una parte conocida como el Palacio Viejo, que conserva los muros exteriores y las torres, y en cuya fachada destacan los ventanales góticos, la puerta principal renacentistas y la torre de la Atalaya. Mientras que, el Palacio Nuevo, representa el estilo gótico civil francés.
Castilla y León: Castillo de Peñafiel (Valladolid). Puede que lo más impresionante de este castillo es que tiene forma de barco ya que al estar ubicado sobre una loma estrecha y larga, adquiere esa estructura. Así, la fortaleza, cuya construcción data del siglo X y es Monumento Nacional, cuenta con una planta de 35 metros de ancho por 210 metros de largo. En el exterior se encuentra una primera muralla exterior y una única puerta de acceso, flanqueada por torreones circulares. Y, a continuación, hay otra muralla que delimita el recinto interior, donde podemos encontrar la impresionante Torre del homenaje, un prisma rectangular de más de 30 metros de alto con tres plantas abovedadas.