Asturias
No sin tus hijos
La costa asturiana es un escenario ideal para recorrerlo en familia. Kilómetros de senda, que pueden recorrerse en bicicleta o paseando, nos ofrecen vistas de impresión y nos muestran una personalidad propia y reconocible. Te descubrimos los motivos para disfrutar en Asturias este verano con tus hijos.
La parte marinera y oceánica que tiene Asturias es uno de sus espacios de seducción. Es un camino con buenas vistas, con un itinerario cultural de gran importancia a nivel europeo como es el Camino de Santiago del norte o de la costa, y en medio de este panorama de grandes arenales, de ricos pedreros, de acantilados espectaculares, de cabos que hacen las delicias de los navegantes, de islas e islotes, de castros, de cuevas submarinos, de oleaje y bufones, de vientos muy activos, de salitre, de buenos mariscos. Y en medio de todo, la sorprendente vida de los pueblos y villas ‘colgados’ en este itinerario de costa abierta a lo oceánico, abrupta y dulce a un tiempo
Esta costa es igual de prodigiosa sea cual sea la dirección o el sentido en el que se haga el recorrido. Cuando nos adentramos en el Principado por la costa, la primera visión de Asturias es eminentemente fluvial, de ría, de gran ría que ya sabe a mar. En un lado, la ría del Eo y en el otro la de Tinamayor. Las dos son generosas, abundantes y de agradable paisaje, y las dos son premonitorias de lo que después nos encontramos: una atalaya de más de trescientos kilómetros sobre un océano inmenso, indómito, cristalino a veces y siempre único para la pesca, para el submarinismo, para la navegación, para el avistamiento de aves… o para decenas de actividades, entre ellas también la de ir de playa. Decenas de actividades que puedes compartir con tu familia, sea cual sea la edad de tus hijos.Y entre arenal y arenal, cabos y acantilados, la ruta nos lleva de pueblo en pueblo y de villa en villa marinera. Todas tienen un denominador común: saben a mar, a salitre, a buen pescado y mejor marisco, a viento y playa, a sol, a lluvia, a relax en cualquier época del año. Todas tienen bares, chigres, tabernas, sidrerías y restaurantes donde se degustan platos y guisos marineros con mucho oficio.
Su cocina sabe a tradición pero tampoco está exenta de innovación, en todas ellas hay locales y chefs que cada vez más, tomando como base la sabiduría ancestral de los fogones en Asturias, combinan el pasado con su afán investigador y el resultado siempre es brillante. Todas tienen flota pesquera, muchas puerto deportivo. Todas tienen construcciones típicas de puerto de mar, y algunas interesantes cascos históricos.
La arquitectura es en todas ellas valor destacado. Todas son muy devotas. Algunas celebran la Virgen del Carmen, la patrona de los marineros, y la honran con preciosas procesiones marineras, otras celebran otras Advocaciones y siempre como telón de fondo la mar… Todas son muy turísticas y cada una tiene su singular historia para vivirla tranquilamente
Báñate en alfombras florales en Castropol
Es una fiesta única en toda Asturias y se hace en el día del Corpus Christi. El escenario es Castropol y su casco histórico de estrechas calles. Se celebra todos los años. El Cuerpo de Cristo, bajo Palio, acompañado por los niños y niñas de Primera Comunión llevando a hombros al Niño Jesús y a la Virgen, y seguidos por la banda de música, recorren las calles de Castropol adornadas con vistosas alfombras florales aludiendo a distintos temas, principalmente religiosos.
Estas alfombras son realizadas por todos los vecinos de la Villa, y supone un gran trabajo artesanal que lleva meses de preparación, dado que primero se deben diseñar los dibujos que llevarán las alfombras y las correspondientes medidas, para posteriormente, decidir los colores y materiales; además los días previos a la fiesta, toca la recolección de flores, y durante la noche anterior, todos los vecinos adornan las calles principales de la Villa.
Para la confección de estas maravillosas alfombras se utilizan principalmente flores, acompañadas de semillas, conchas, piedras, y posos de café. Sin duda, una procesión distinta en un entorno inigualable con vistas a la ría del Eo y al pueblo de Figueras.
Un bautismo de olas en Tapia
Tapia de Casariego es otras de las villas con encanto en la costa asturiana, sobretodo en la zona del puerto con sus típicas tabernas y también en sus zonas de playa. Las playas de Tapia son famosas en el mundo entero porque sus excelentes olas para surfear, tanto es así que desde hace varios lustros, en plena Semana Santa, se celebra una prueba cuyas pruebas son puntuables para el Campeonato del Mundo. Y es que Tapia es desde la década de los años sesenta del pasado siglo es meca de surferos ávidos de descubrir nuevos paraísos para practicar su deporte favorito y dar rienda suelta a su estilo de vida. En Tapia también se come muy bien y hay sitios muy agradables para tomarse unas copas…
Vida de ilustrado en Puerto de Vega
Un alo de fuerza e incluso de misterio envuelven la vista panorámica de Puerto de Vega. Muy antiguo, con aire medieval en su puerto, con vientos de grandes navegantes, con olor a ocle y a pescado, con paisaje de redes y de lonja, humilde y noble a la vez, Puerto de Vega nos desvela algunos capítulos históricos, entre otros la muerte del ilustrado Gaspar Melchor de Jovellanos, en casa de la noble familia de esta villa de apellido Navia Osorio, que le dieron cobertura en su desdichado periplo de persecución bajo las acusaciones de afrancesado en aquel convulso comienzo del siglo XIX en España. Una lección de historia y nobleza a orillas del Cantábrico.
Échate a la ría en Navia
Navia y su ría, otro paisaje amable en la costa asturiana. La ría de Navia es tan poderosa que marca la vida de la Villa. Es un lugar ideal para la navegación y para los deportes náuticos en general, y los naviegos viven de cara a su ría, hasta tal punto que Navia es conocida internacionalmente por su descenso a nado de la ría, una clásica competición deportiva que se celebra cada vez de agosto y atrae a miles de visitantes a la Villa, en una cita que además de estar declarada de Interés Turístico desarrolla un amplio programa de actividades lúdicas y culturales para completar el evento. Pero además Navia es referencia en la literatura romántica gracias al escritor – poeta y periodista – Ramón de Campoamor, natural de la villa y que ha inscrito el nombre de su patria chica en la historia de la literatura.
El sueño de un Premio Nobel en Luarca
La conocida como Villa Blanca es un lugar interesante para la visita. Espléndidas vistas y playas, gran tradición navegante, buenos guisos marineros “a bordo”, terrazas con ambiente, gente de copas… alrededores con quintas de corte indiano, y un Premio Nobel en su historia reciente: Severo Ochoa, que recibió en 1959 este galardón en la modalidad de Medicina, y está considerado uno de los padres de la Bioquímica moderna. Está enterrado en su Luarca Natal mirando al mar.
Una de normandos en Cudillero
“Con mucho rencor en su corazón abandonaron aquellas gentes la tierra de sus antepasados. Los “malditos” normandos les obligaban al exilio, única alternativa a la muerte segura…” Ésta fue, sin duda, la breve historia de algún pueblo de pescadores del norte de Europa que, allá por el s.VIII, buscó una vida mejor y más segura en algún lugar de la costa cantábrica. Así nació Cudillero. El refugio perfecto. El “codo” oculto tras el acantilado. El lugar adecuado para echar el ancla, ajeno a miradas codiciosas.
Y así creció este pueblo cuyo anfiteatro es especialmente llamativo por su configuración y por el colorido de las casas. Aún hoy continúa siendo el refugio ideal para una escapada. Lo tiene todo: ambiente, buenos restaurantes, paseos agradables, alrededores con “charme”…
Aficiónate al tenis-playa en Luanco
Luanco es de los pocos sitios en el mundo que tiene un torneo de tenis-playa en pleno verano – actividad que resulta muy grata para disfrutar del deporte en familia– , al que acuden primeras raquetas del ranking internacional, y donde merced a la existencia de marea (algo característico del Cantábrico, el Mediterráneo no tiene), la pista de juego aparece y desaparece. La villa es una pequeña joya con un coqueto casco antiguo, con buenos restaurantes donde degustar platos marineros, alguna que otra terraza “chil-out”, playas muy cómodas y algún paseo que muy buenas vistas, también una dársena muy accesible para atracar y tomar el vermú, sobretodo en verano.
Siéntete como un Gorila en Candás
A la entrada de esta Villa un cartel anuncia Candás Villa de Olímpicos, y es que esta animada localidad, muy festiva y participativa, que conserva todo el sabor del espíritu marinero, donde se comen las mejores sardinas del Cantábrico, donde destaca su tradición conservera, o su vocación transoceánica, también hay un poderoso amor por el deporte. El piragüismo en Candás levanta casi tanta devoción como sus conocidas procesiones de Semana Santa. El afamado club Los Gorilas ha sido pionero en la preparación de una cantera que ha dado a este deporte y a España figuras tan destacadas como Herminio Menéndez, triple medallista olímpico y participante en cuatro juegos consecutivos.
Sigue el rastro del Doctor Mateo en Lastres
Todas las villas y pueblos marineros de Asturias son muy fotogénicos, y por tanto, muy agradecidos para rodajes televisivos y cinematográficos, y Lastres no es una excepción. Su disposición de casas que ‘cuelgan’ hacia el mar se nos antoja espectacular especialmente en los atardeceres y amaneceres. Lastres es muy conocido por su lonja, por su buena cocina, por su puerto, por su playa, por su vistas, por su belén navideño, por su ilustres veraneantes y por decenas de anécdotas más, pero saltó a la palestra mediática gracias al éxito de la serie Doctor Mateo, cuyos exteriores estaban íntegramente grabados en el pueblo, que en la ficción televisiva era San Martín del Sella. Gonzalo de Castro será ya para siempre el médico del pueblo, que tiene ya su ruta del Doctor Mateo.
Como un Emperador en Tazones
Si Lastres tiene galeno, la vecina Tazones tiene emperador. La historia imperial española del Renacimiento tal vez no sería igual sin Tazones, que acogió por circunstancias no previstas en el viaje inicial la primera visita oficial del un jovencísimo Carlos V a España. Tal vez despiste de cartógrafos, tal vez el temporal, el imberbe monarca desembarcó en este puerto de cuento de hadas e hizo noche en la histórica Villaciosa, que conserva en su casco antiguo la casa donde Carlos V hizo noche. Semejante efemérides la recrea el pueblo de Tazones todos los años en pleno verano. Carlos V y el buen marisco que se come en este puerto son dos reclamos ineludibles para una visita.
Recordando a Antonio Mingote en Ribadesella
Ribadesella es una Villa que goza de reconocimiento internacional merced al Descenso Internacional del río Sella, una de las carreras de piraguas más famosas del continente. Además, es un templo del Arte Rupestre con reconocimiento por parte de la UNESCO, cuyo referente es la Cueva de Tito Bustillo y todo el macizo de Ardines. Sin olvidar las huellas de dinosaurio en los acantilados de Tereñes o los ejemplos de arquitectura indiana en el ‘frente playa’ de Santa Marina, o el encanto de su casco histórico. Y como no, como referencia de arte reciente el de los paneles del gran humorista Mingote, en el paseo de la Atalaya, donde con su ingenio dibujante narra toda la historia de la Villa.
Nobleza obliga en Llanes
La blasonada y noble Llanes exhibe en su impresionante casco histórico el mayor número de palacios existentes en cualquiera de los cascos históricos de otras villas y ciudades asturianas. Además su puerto –de gran tradición ballenera en la antigüedad– evidencia toda la personalidad y belleza de la costa kárstica del oriente asturiano, y acoge además una de las obras más nombradas del artista vasco Agustín Ibarrola: Los Cubos de la Memoria. Llanes tiene de todo: el poderoso Mazucu, el Cuera y los Picos de Europa a sus espaldas, y un ambiente idóneo para cualquier escapada inolvidable en familia.