Evaneos se distingue por su capacidad para crear viajes personalizados únicos y memorables, donde los viajeros toman el mando de la organización de su viaje asesorados por expertos locales. Acompáñanos a descubrir las ventajas de viajar con Evaneos explorando lugares extraordinarios, disfrutando de un turismo más relajado y auténtico, y apoyando a las comunidades de destino.
En este reportaje, nos centraremos en cuatro destinos exóticos que son ideales para viajar con niños en los meses de septiembre y octubre: Costa Rica, Croacia, Vietnam y Túnez. Estos lugares ofrecen un clima excelente durante esta época, pero con la ventaja añadida de estar menos masificados, lo que permite disfrutar de unas vacaciones más tranquilas y personalizadas. En este artículo te descubrimos por qué estos destinos son una apuesta segura para viajar en familia con Evaneos, organizando vuestro viaje 100% a medida y con la ayuda de un equipo que ofrece garantía y seguridad para que disfrutéis de todo el proceso.
Además, Evaneos promueve un viaje más consciente, centrado en proporcionar experiencias únicas, al tiempo que se fomenta un turismo menos invasivo que preserva culturas y ecosistemas.
Costa Rica: Un paraíso natural para toda la familia
Tu viaje a Costa Rica empezará con una maravillosa naturaleza que os dejará sin palabras. Este es el mayor atractivo del país, además de la amabilidad de sus gentes. Multitud de planes y actividades os esperan en este paraíso salvaje. Si su frase cotidiana es “pura vida”, muchas cosas buenas debe de tener, ¿no?
El Parque Nacional de Tortuguero es un destino ideal para familias con niños. Este pequeño pueblo en la costa caribeña solo es accesible por aire o en barca por el río, lo que añade un toque de aventura desde el principio. Entre los meses de julio y septiembre, miles de tortugas llegan a las playas de Tortuguero para poner sus huevos, ofreciendo una oportunidad única para que los niños aprendan sobre la naturaleza. Además, podéis disfrutar de un tranquilo paseo en barca por el enorme río, observando monos, aves y diferentes especies de reptiles como cocodrilos, iguanas y boas.
Puerto Viejo de Talamanca es perfecto para unas vacaciones familiares relajadas. Sus numerosas playas de agua cálida y arena fina, rodeadas de vegetación exuberante, ofrecen un entorno seguro y divertido para los niños. El pueblo cuenta con un ambiente vibrante, lleno de bares, tiendas y restaurantes. Las playas son muy calmadas, ideales para que los niños hagan snorkel, jueguen en la arena o disfruten de paseos hasta ver el atardecer. La playa de Punta Uva, la playa de Manzanillo y el Parque Nacional de Cahuita son algunos de los mejores lugares para visitar en familia.
Monteverde, con su famoso bosque nuboso, es una experiencia mágica para las familias. Esta zona montañosa de interior, conocida por sus días lluviosos y cielo gris, ofrece rutas de senderismo aptas para todas las edades. Los niños podrán avistar animales en su hábitat natural y disfrutar de aventuras en la montaña, aprendiendo sobre la biodiversidad en un entorno natural y educativo.
Guanacaste, situada en la parte del país que da al Pacífico Norte, es un excelente lugar para familias aficionadas al buceo y la naturaleza. Con su fascinante vida silvestre, bosques tropicales y calas vírgenes, ofrece numerosas actividades al aire libre. Las cataratas Llanos son un sitio espectacular que los niños disfrutarán explorando, con oportunidades para nadar y descubrir la belleza natural de la región.
Vietnam: Un destino de ensueño para toda la familia
Viajar a Vietnam con niños es un excelente plan para compartir en familia. El país ofrece actividades para todas las edades, desde experiencias culturales hasta aventuras en la naturaleza y momentos de relax en sus playas.
Un viaje a Vietnam también es una oportunidad para explorar el país vecino, Camboya. Este destino complementario permite admirar la belleza de Angkor y la selva del norte. A través de Phnom Penh, descubriréis la fascinante historia de Camboya. No dudéis en hacer un circuito a Vietnam y Camboya para una experiencia completa.
Este hermoso país del sudeste asiático ofrece una gran variedad de paisajes según la región que visitéis: montañas con terrazas de arrozales, paisajes kársticos con aguas turquesas, ciudades llenas de historia y pueblos rurales con tradiciones únicas. Algunos de los lugares que no podéis dejar de ver en Vietnam son:
Hanoi, la capital de Vietnam, es una excelente opción para familias con niños. Esta ciudad combina el encanto de una ciudad de provincias con la modernidad, ofreciendo una mezcla de actividades que mantendrán a los más pequeños entretenidos. Desde aquí, podéis explorar la hermosa Bahía de Halong, donde los famosos islotes emergen del agua en una atmósfera mágica, ideal para una excursión familiar en barco.
Hoi An es una ciudad histórica que encantará a las familias. Su ambiente romántico, con farolillos, ríos, flores y arquitectura de madera, transportará a todos a otra época. Pasear por su casco histórico es como un viaje en el tiempo, donde podréis descubrir una fascinante mezcla de influencias chinas, japonesas, portuguesas y vietnamitas. Los niños disfrutarán especialmente de las coloridas calles y los mercados llenos de vida.
Sa Pa, situada en la zona montañosa fronteriza con China, es perfecta para familias aventureras. Aquí encontraréis paisajes espectaculares y la oportunidad de conocer diversas etnias locales. Es ideal para hacer senderismo en familia entre terrazas y arrozales, visitar cascadas y lagos, y aprender sobre la vida y cultura de sus habitantes.
Hue, una ciudad imperial, es un destino ideal para el turismo cultural en familia. No os podéis perder la Ciudad Prohibida Púrpura, la pagoda de Thien Mu y las tumbas imperiales dentro de la Ciudadela. Estos lugares históricos ofrecen una gran oportunidad para que los niños aprendan sobre la rica historia y cultura de Vietnam de una manera interactiva y envolvente.
Croacia: Un tesoro europeo para toda la familia
Viajar a Croacia es un sueño hecho realidad para cualquier viajero curioso. Este país ofrece una combinación perfecta de aguas turquesas, rica cultura y vibrante ambiente europeo. Con paisajes variados y vírgenes, ciudades históricas, playas y calas rocosas, Croacia tiene tanto que ofrecer que seguramente os enfrentaréis a más de un dilema a la hora de elegir.
Además, los croatas son un pueblo acogedor con una deliciosa y rica tradición culinaria. Con 1.700 kilómetros de costa y unas 1.200 islas por descubrir, como la isla dálmata de Korcula, Croacia es un destino ideal para encontrarse con una fauna y flora bien preservadas. Para los más aventureros, una excursión por el Parque Nacional de Plitvice, Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1979, es imprescindible.
Algunos de los sitios más interesantes para visitar son:
Zagreb, la capital de Croacia, es un destino ideal para familias con niños. Aunque está alejada de la costa, ofrece una gran cantidad de actividades educativas y recreativas. Podréis conocer la historia del país visitando museos interactivos y monumentos históricos, disfrutar de la naturaleza en sus numerosos parques y jardines, y descubrir su vibrante ambiente cultural, perfecto para paseos familiares.
Dubrovnik es una joya junto al mar turquesa que encantará a toda la familia. Sus calles empedradas y tejados anaranjados crean un escenario de cuento de hadas. Los niños disfrutarán explorando las murallas de la ciudad y jugando en las playas, mientras los adultos pueden relajarse en alguna encantadora terraza con un refresco local. La ciudad también ofrece diversas actividades culturales y excursiones en barco que toda la familia puede disfrutar.
Brac es una de las muchas islas del mar Adriático y es ideal para familias que buscan un lugar tranquilo para descansar. Aquí, podréis alejaros de las zonas más concurridas y disfrutar de playas serenas y aguas cristalinas. Es un lugar perfecto para que los niños jueguen en la arena y se bañen de forma segura, mientras los padres disfrutan de la paz y la belleza natural de la isla.
Split es una ciudad que combina historia y modernidad, ofreciendo una variedad de actividades para familias. Pasear por el paseo marítimo es una delicia para todos, con vistas impresionantes y espacios abiertos para que los niños corran y jueguen. El Palacio de Diocleciano y los museos cercanos proporcionan un toque cultural, permitiendo a los niños aprender sobre la historia mientras se divierten explorando.
Túnez: Un destino fascinante
Cuando pensamos en Túnez, nos vienen a la mente paisajes encantadores, antiguas ruinas y vastos desiertos. Pero este país ofrece mucho más: es un cruce de caminos de civilizaciones históricas como fenicios, romanos y franceses. Túnez es una tierra de intercambios y la puerta al Sahara, un destino sorprendente y cautivador, con una mezcla única de lo antiguo y lo moderno, y una hospitalidad legendaria que se refleja en su gente. Ya sea que busquéis autenticidad, paisajes naturales impresionantes o simplemente relajación, en un viaje a medida a Túnez encontraréis más de lo que imaginabais.
Túnez, aunque pequeño, ofrece la oportunidad de explorar mucho en un solo viaje. Desde aventuras en el desierto y ruinas arqueológicas hasta relajarse en las playas mediterráneas, siempre rodeados por la hospitalidad tunecina. Aquí algunos lugares imprescindibles:
Yerba es una pequeña isla con una rica historia que encantará a las familias. Podéis pasear por los zocos de Houmt Souk, la capital de la isla, entre casas azules y blancas cubiertas de flores, ofreciendo un ambiente colorido y seguro para los niños. La Sinagoga de la Ghirba y la calzada romana que une la isla al continente son sitios fascinantes para que los niños aprendan sobre la historia y la cultura de la región mientras disfrutan del paisaje de arena dorada y aguas azul intenso.
Sidi Bou Said es una ciudad ideal para que las familias se relajen y disfruten de unas vistas impresionantes al Mediterráneo. Sus edificios tradicionales blancos y azules decorados con buganvillas rosas crean un entorno pintoresco y acogedor. Es un lugar perfecto para que los niños jueguen y los padres se inspiren en la belleza del entorno.
Kairuán, conocida como ciudad sagrada, ofrece una inmersión en la cultura e historia que será educativa y emocionante para los niños. Sus impresionantes mezquitas, especialmente la Gran Mezquita de Kairuán, con sus columnas romanas y bizantinas, y el Gran Mausoleo, son lugares donde los niños pueden aprender sobre la arquitectura y la historia de manera envolvente.
Hammamet es famosa por sus idílicas playas y medinas antiguas, creando un entorno perfecto para unas vacaciones familiares. Los niños se divertirán viendo camellos y coloridas barcas pesqueras, mientras pasean por calles llenas del aroma de jazmín y azahar. Las puertas árabes de las casas, con su arte tradicional, ofrecen una experiencia visualmente rica y culturalmente significativa para toda la familia.
Tozeur, una ciudad oasis, es la puerta al desierto y un destino emocionante para familias aventureras. Podréis perderos entre sus mil palmeras y probar los deliciosos dátiles típicos de la zona. Las ‘rosas del desierto’ en los lagos salados son una maravilla natural que encantará a los niños. Explorar el desierto desde Tozeur es una experiencia única que toda la familia disfrutará, ofreciendo oportunidades para aprender sobre el ecosistema del desierto y disfrutar de paisajes impresionantes.