Induráin, Gasol, Raphael o Antonio Banderas pertenecen a un muy reducido grupo de personas que tienen algo en común y que es muy complicado en la actualidad: son personas con una gran carrera profesional y que además es muy difícil encontrar, si no imposible, gente que no los aprecie y valore.
Antonio Banderas, tras una toda una vida triunfando en España y en todo el mundo, y sin retirarse de esa carrera, decidió crear en un ciudad natal, Málaga, todo un complejo entramado dedicado a las artes escénicas. Una escuela, un teatro, exposiciones, etc.
De este amor por su ciudad, y también de su trabajo incansable, nació un teatro, el Teatro del Soho CaixaBank. Y como no era cosa de dejar las cosas a medias, además de traer espectáculos como cualquier teatro, ha empezado a producir o crear espectáculos propios.
Evidentemente, Antonio Banderas no es de esas personas que hacen las cosas a medias, así que en GYPSY, aparte de ser el impulsor o empresario, ha adoptado el rol de director. Spoiler: lo hace muy bien y el resultado es espectacular y de una calidad poca veces conseguida.
GYPSY es una adaptación de uno de los mejores musicales de la historia, que se estrenó en Broadway em 1959 y ha ganado un montón de premios.
Es la historia de una madre con dos hijas a las que quiere convertir en estrellas del espectáculo a toda costa. Curiosamente, la verdadera protagonista de GYPSY es la madre, no las dos pobres niñas a las que lleva por todo Estados Unidos en plena Gran Depresión para conseguir su estrellato.
Como la trama es interesante y muy bonita, no voy a destripar el argumento, porque aparte de ser un gran musical, el tema teatral y de argumento, están muy bien conseguidos.
Sólo me gustaría hacer una reflexión, ya que somos la publicación “Viajar con HIJOS”. Lo del padre/madre que quiere vivir en la vida de sus hijos lo que ellos no pudieron conseguir, es un clásico de nuestros días.
Ya sea en el deporte o en el espectáculo, es corriente ver a padres que machacan a sus hijos en pos de unos sueños que son de ellos, no de sus hijos. Deberíamos de aprender todos los que veamos GYPSY, lo horrible y ridículo que queda y el mal que se le hace a esas pobres criaturas que se sienten obligadas a ser “el nuevo xxxx lo que sea”.
Volviendo al espectáculo en sí, todo está perfecto. Desde la música en directo, la iluminación y sonido, pasando por la escenografía, y como no, por un elenco de actores absolutamente brutal que se meten en la piel de sus personajes a la perfección.
En definitiva, GYPSY es un Musical de una calidad excepcional que se ha podido disfrutar en el Teatro del Soho CaixaBank gracias al genio, entrega y profesionalidad de un grande como es Antonio Banderas
LOCALIZACIÓN
C. Córdoba, 13, 29001 Málaga
952 42 91 73
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Web de la obra: https://teatrodelsoho.com/evento/gypsy/
Web del Teatro: https://teatrodelsoho.com/